Al estrenar un coche siempre se teme ese momento, que siempre llega, en el que se le hará un roce o un arañazo a la pintura, se abollará una chapa al sufrir un golpe o se le provocará algún tipo de desperfecto al sufrir algún incidente. Y siempre da más rabia cuanto más nuevo es el coche. Sin embargo, ninguno de estos escenarios es comparable con lo que debió sentir el conductor de este espectacular Ford GT al estrellarlo solo un mes después de comprarlo.
Ponerse en la piel de Robert Guarini, un conductor de 50 años residente en Boca Ratón, Florida, una ciudad conocida por su maravilloso clima y sus campos de golf; provoca una peor sensación cuando se conoce la verdadera causa de este accidente de tráfico, que involucra su recién comprado coche.
Guarini adquirió un deportivo Ford GT en el mes de abril en una subasta en Barrett-Jackson, en Palm Beach, por 704.000 dólares. El accidente, que se produjo a principios de mes, estuvo provocado por la falta de experiencia de este conductor a los mandos de un coche con cambio de marchas manual.
Mientras conducía saliendo de la urbanización en la que reside, Guarini quiso cambiar la marcha a la que circulaba y acabó estrellando el bólido, que se ve que sufrió daños importantes en la zona frontal de la carrocería. El accidente se produjo a las seis de la tarde y este conductor quiso dejar claro que no circulaba a grandes velocidades: «No quiero que la gente piense que estaba corriendo a 90 mph, iba a 35 mph», declaró este hombre al medio especializado Road and Track.
La policía de Boca Ratón no tiene claro si, efectivamente, la velocidad jugó un papel determinante en el accidente. Al parecer, el coche calzaba unos neumáticos desgastados y al ir a cambiar de primera marcha a segunda,