RAÚL PIÑA
Madrid
Actualizado Lunes, 2 mayo 2022 —19:51
La Moncloa no espera a la comisión de secretos del Congreso y comunica que los móviles del presidente y de la ministra Robles fueron atacados por el sistema Pegasus
El Gobierno tiene constatación desde hace días que los móviles de Pedro Sánchez y Margarita Robles fueron espiados hace un año mediante el sistema Pegasus, el mismo con el que se accedió a los terminales de los independentistas. Esta circunstancia es la que se manejaba en La Moncloa para mantener la calma ante el peligro de que la gobernabilidad en el Congreso se fuera al traste y era su as para desactivar la campaña y los chantajes de los nacionalistas ante el espionaje a sus líderes. Pero la comunicación pública de esta espionaje se precipita ahora, siendo Sánchez el primer jefe de Gobierno en ejercicio que reconoce haber sido espiado por el software israelí Pegasus, es decir, reconociendo la vulnerabilidad de la seguridad nacional.
El Ejecutivo decidió hacer público este lunes estas «intrusiones», estos «ataques externos» a los terminales del presidente del Gobierno y la ministra de Defensa como argumento con el desacreditar los ataques de sus socios y poner a Sánchez en la misma circunstancia de víctima que quienes, como por ejemplo el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, cuestionan su proceder. Equiparar roles. El Gobierno se presenta ahora como espiado, ya no solo como espiador.
El móvil de Sánchez sufrió en mayo de 2021 dos intrusiones que supusieron el robo de 2,6 gigas de información en la primera y de 130 megas en la segunda. Y el de Robles fue intervenido en junio de 2021, sustrayéndole 9 megas de información. Este espionaje mediante el sistema Pegasus fue certificado al Gobierno este