La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la covid ha causado, de forma directa o indirecta, 14,9 millones de muertes en todo el mundo desde el 1 de enero de 2020 hasta el 31 de diciembre de 2021. Ese total incluye los 6,2 millones de decesos por covid notificados oficialmente a la OMS por sus 194 países miembros. El resto corresponde a muertes causadas por el coronavirus, pero que no fueron notificadas como tales, así como aquellas producidas por otras enfermedades que no pudieron ser atendidas debido a la sobrecarga que sufrieron los sistemas sanitarios en la etapa aguda de la pandemia.
Es el cálculo del exceso de mortalidad producido en esos dos años. Es decir, la diferencia entre las muertes que ocurrieron y las esperadas sin pandemia. En este resultado también han influido decesos que desde cierto punto de vista se “evitaron” debido a que los confinamientos redujeron el riesgo de accidentes de tráfico y ocupacionales, han explicado los portavoces de la organización en una rueda de prensa.
La cifra es inferior a otra estimación publicada en marzo en la revista The Lancet para el mismo periodo de estudio: 18,2 millones de fallecimientos.
“Nos enfocamos en el exceso de mortalidad porque sabemos que en muchos países los datos procedentes de los test eran insuficientes. También sabemos que no todos los países tienen un sistema de certificación (de fallecimientos) que cumpla con las prácticas estándar”, ha dicho William Msemburi, experto en estadísticas de la OMS. Es por ello que a pesar de que los modelos matemáticos utilizados por la organización son fiables, calcular cuántas muertes fueron por covid no reportado y cuántas por otras dolencias crónicas sin tratar es una labor que requiere de la colecta de datos