Marc Márquez se llevó la victoria en el GP de Emilia-Romaña tras una caída de Pecco Bagnaia a pocas vueltas para el final, que además proclamaba campeón del mundo a Fabio Quartararo. Cuando parecía que el italiano lo tenía todo de cara para repetir triunfo en Misano, en su casa, se fue al suelo yendo primero y sirvió en bandeja el título al francés. Aunque se cayera Quartararo ya era campeón porque llegaba con una ventaja de 52 puntos.
La carrera dio un giro de 360 gradas. Pecco parecía muy fuerte. Salía desde la pole y se mantuvo primero hasta la caída. Desde el inicio se marchó junto a Miller y Márquez, pero su compañero de equipo se cayó a 23 vueltas para el final y Marc ganaba una posición. A partir de ahí se convirtió en una pelea de