Actualizado Martes, 26 octubre 2021 —08:51
La clave del discurso de Arnaldo Otegi la semana pasada en el icónico Palacio de Aiete de San Sebastián no es tanto lo que dijo -«sentimos enormemente su dolor, eso nunca debió ocurrir»- como lo que no dijo: no condenó a ETA, no reconoció su implicac
Hazte Premium desde 1€ el primer mes
Aprovecha esta oferta por tiempo limitado y accede a todo el contenido web
Lo quiero