El Gobierno ha vetado la tramitación en el Congreso de una ley del Partido Popular que proponía convertir en permanentes las reformas fiscales de carácter temporal que el Gobierno acordó para reducir el recibo de la luz. Proponen los populares extender de forma prolongada la reducción del IVA eléctrico para mantenerlo en el 10% y suspender el Impuesto de Generación Eléctrica que grava hasta un 7% la factura, además de trasladar los ingresos de los derechos de CO2 al recibo eléctrico para reducir su coste.
Todas estas medidas servirían para abaratar la factura en un 20%. El Gobierno sanchista ha argumentado que implementar esas medidas tendría un coste negativo para el Estado de 872 millones de euros y que, además, mantener de forma
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