Greenpeace ha saboteado este martes la descarga de un barco gasista en el puerto de Sagunto (Valencia). La acción de la ONG ecologista coincide con el alza de los precios de la energía y se produce pocos días antes de que Argelia cierre el gasoducto que surte de gas a España a través de Marruecos y Tarifa. Por eso, muchas personas han criticado en las redes sociales la acción recordando lo que sucedió en 1985 con el buque insignia de Greenpeace Rainbow Warrior.
La acción de Greenpeace se produce en un momento delicado para España. La disputa política entre Argelia y Marruecos tiene como consecuencia que el suministro de gas a España se reduzca considerablemente, lo que generará de nuevo el alza de los precios. La solución del Ejecutivo